Comprender la diferencia entre el valor y la cotización de una acción en bolsa
Lo primero que se necesita para comprender mejor por qué una acción no puede caer hasta los cero euros es distinguir entre el valor y la cotización de un título bursátil.
El valor de una acción corresponde en este caso a una estimación del valor de la empresa que emite esta acción. Además, el valor de una acción en bolsa se calcula a partir del análisis financiero. Para ello, utilizamos los datos del informe contable, la cuenta de resultados y las ratios financieras de la empresa emisora. El valor de una empresa se basará, por un lado, en lo que ésta posee, es decir, su activo, con el cash, los stocks o los bienes inmobiliarios, y, por otro lado, en lo que debe, es decir, su pasivo, con las deudas o los capitales propios. También se puede evaluar el valor de una acción a partir de los flujos de tesorería o de varias ratios financieras.
Por su parte, la cotización de una acción corresponde a la estimación de este valor por parte del mercado. También permite conocer la capitalización bursátil total de la empresa al multiplicar la cotización de una acción por el número de acciones total en circulación.
Cuando la cotización de una acción es superior al valor real del título, se dice que esta acción está sobrevalorada. En el caso contrario, si la cotización de una acción es inferior al valor real del título, se habla de infravaloración del título.
¿Puede ser nulo el valor de un título?
Ahora que conocemos la diferencia entre el valor y la cotización de una acción, podemos preguntarnos si el valor de un título puede ser igual a cero o no. En realidad, para que esto sea posible, será necesario que la empresa emisora de este título se declare en quiebra. En este ejemplo, la empresa en cuestión ya no cotiza en los mercados financieros, por lo que ya no se puede operar con sus títulos. Sin embargo, esto no significa que la cotización de la acción haya caído a cero.
También observaremos aquí que cuando una empresa quiebra, sigue siendo probable que conserve valores. En efecto, cada empresa posee un cierto número de bienes, como equipamientos o bienes inmobiliarios, que tienen un valor propio y que pueden cederse. Cuando se salda la deuda de la empresa, los accionistas pueden recuperar una parte de su capital invertido mediante la reventa de estos bienes. También puede ocurrir que una empresa en quiebra encuentre un comprador, y no es posible comprar una empresa a cero euros porque el comprador debe entregar como mínimo un euro simbólico para la transacción.
¿Puede ser nula la cotización de una acción?
Ahora nos interesaremos por la cotización de la acción y la posibilidad de que esta caiga a cero. Como hemos mencionado rápidamente en la introducción, si bien la cotización de una acción puede perder una gran parte de su valor en períodos largos, en ningún caso puede ser igual a cero. Sin embargo, puede ocurrir que la cotización de un título se suspenda temporalmente cuando la caída es demasiado importante y abrupta, o que incluso se retire la acción de la cotización en caso de que la empresa quiebre o de que el accionista principal compre acciones.
También puede ocurrir que la cotización de una acción siga bajando durante mucho tiempo. Sin embargo, nunca llegará a cero euros si el título cotiza en el mercado. Así, la cotización de una acción puede perder perfectamente un 99,99999% de su valor, pero nunca podrá perder el 100%. Por esto, a veces asistimos a descuentos espectaculares de algunos títulos bursátiles, pero nunca es posible que un título deje de tener valor. Para comprender mejor este fenómeno, podemos comparar una acción en bolsa con un bien inmobiliario, ya que un bien inmobiliario puede perder mucho valor, pero nunca será gratis mientras exista y no se destruya. Lo mismo ocurre con una acción en bolsa.