
Una anticipación interesante sobre la cotización del oro para los próximos años
Antes de interesarnos por cuál podría ser la cotización del oro en 2030, le proponemos descubrir primero cómo ven los analistas de mejor reputación a este valor y su progresión en los próximos años.
Hace poco, el grupo bancario suizo UBS publicó un análisis que mostraba una anticipación muy positiva de la cotización del oro de aquí al 2023, y la verdad es que estos últimos meses han sido prometedores en lo que respecta al preciado metal amarillo, el cual ha ganado varios dólares desde el importante período de poca actividad que experimentó en el 2018. Según UBS, la cotización del preciado metal amarillo no debería detenerse aquí, sino que debería aumentar aún más hasta finales de 2019 con una tendencia alcista más bien fuerte e inesperada.
Sin embargo, y a pesar de un alza sin duda rápida de aquí a finales de año, los años siguientes serán, de nuevo según esta fuente de análisis, más modestos en lo que respecta a la volatilidad y con movimientos menos sorprendentes. Así pues, deberíamos observar un alza continua de la cotización de este activo hasta el 2023, al igual que para otros metales preciosos como la plata y el platino, los cuales presentan además una correlación interesante con el oro. Sin embargo, relativizaremos las previsiones para la plata, las cuales dependen en gran medida de la demanda proveniente de las aplicaciones industriales, y que podría verse muy influenciada por la salud económica mundial.
Por desgracia, las previsiones hechas por UBS no van más allá de este período de unos años y no nos informan sobre cómo será la cotización del oro en el 2030, es decir dentro de poco más de 10 años. Para ello, necesitamos hacer nuestros propios análisis.
Cuál es la mejor forma de prever la cotización del oro en el 2030
Si bien ya puede tener una idea más o menos clara de las posibilidades de evolución de la cotización del oro para los próximos años, prever una inversión para 10 años puede resultar un poco más complejo y, obviamente, ahora es un poco pronto para predecir de forma precisa qué pasará con el precio del preciado metal amarillo en el 2030.
Por lo tanto, tendrá que informarse de las posibles futuras previsiones que hagan grandes organismos financieros en los próximos meses y años para tener todas las posibilidades de su parte. Por supuesto, también puede contar con su propia capacidad de análisis y aprender a anticipar usted mismo las futuras variaciones de estos activos. Para ello debe conocer muy bien los diferentes factores y elementos que pueden influir de forma directa en el precio de esta materia prima. Por lo general, este análisis le permitirá determinar las tendencias adecuadas a corto plazo para estos valores, pero también le permitirá comprender cómo puede comportarse este activo a medio plazo.
Es evidente que una previsión correcta de la cotización del oro es un ejercicio un poco complicado que requiere una cierta experiencia. Hay una razón por la que los inversores institucionales solicitan mucho a los expertos en el tema, y es que estos disponen de la experiencia y los conocimientos necesarios para hacer previsiones más o menos fiables. En efecto, sabemos que, debido a su volatilidad y la extrema sensibilidad a los otros mercados, el oro sigue siendo uno de los valores más complejos que analizar tanto a medio como a largo plazo. Sin embargo, podemos determinar de una forma más precisa y fiable las tendencias a corto plazo. Lo que le explicaremos a continuación no le permitirá saber hoy mismo cómo puede evolucionar la cotización del oro de aquí al 2030, pero sí le permitirá hacer una previsión relativamente interesante y fiable para 5 años.
En efecto, el único dato fiable cuando analizamos las futuras evoluciones de la cotización del oro es la producción de este metal. Sabemos que, pase lo que pase, el oro es un metal escaso cuya cantidad disponible sólo aumenta de una forma lenta y previsible. Esta escasez y la limitación en la producción del preciado metal amarillo provocan un ligero alza del precio de la onza cuando la demanda mundial aumenta, algo lógico porque en este caso no se puede aumentar la producción de oro para hacerle frente.
Los diferentes indicadores que permiten analizar la cotización del oro a medio plazo
Además de los datos fijos y conocidos sobre las capacidades de producción del oro, es necesario también analizar otros factores influyentes si quiere invertir en el oro a medio plazo. De hecho, los expertos se basan en estos mismos indicadores para hacer sus previsiones y utilizan diferentes elementos considerados como fiables.
En primer lugar, tendremos en cuenta el comportamiento de los bancos centrales, algo esencial. Las decisiones que tomen estos bancos tendrán mucha importancia en la evolución de la cotización del oro. Así pues, este elemento es el primero que debe utilizar en el marco de los análisis fundamentales de estos valores. Sabemos especialmente que cuando algunos bancos centrales, como los de los países emergentes, aumentan su demanda de oro, a corto plazo esto conlleva un alza de los precios de estos valores. Cuando un país se desarrolla y su banco central no dispone de mucho oro en comparación con otros organismos de países desarrollados, como los bancos centrales europeos y americanos, el objetivo en caso de crecimiento será aumentar las reservas para los siguientes años.
Del mismo modo, tendremos en cuenta la política monetaria de la FED, o Reserva Federal Estadounidense, que es el banco central de Estados Unidos, y la cual tendrá una fuerte influencia en estos valores. Como ha demostrado el historial del oro estas últimas décadas, la evolución de las tasas de interés fijadas por este organismo oficial influye de forma directa en la cotización de estos metales preciosos. Cuando la FED decide mostrar sus tasas de interés, la cotización del oro casi siempre sufre un descenso importante. Pero ¿a qué se debe esta relación entre el otro y la política monetaria estadounidense? En realidad, en este caso debemos comprender que el precio del oro cotiza en dólares estadounidenses. Esto significa que cuando el dólar tiene una tasa de interés fuerte, atrae a los inversores, lo que aumenta su valor y hace que el oro sea menos atractivo ya que es más caro para los inversores que lo compran con otras divisas.
Otros especialistas del análisis del oro hacen sus previsiones utilizando otros tipos de activos más sorprendentes, como las acciones en bolsa. Este método no se utiliza por casualidad, ya que muy a menudo observamos una correlación negativa entre la cotización de las materias primas como el oro y la cotización de las acciones en bolsa. De este modo, constatamos que cuando el precio de las acciones desciende, el del oro tiende a subir, y esto ocurre en ciclos que pueden durar hasta quince o veinte años. Encontrará algunas fuentes en línea que le permitirán confirmar esta hipótesis mediante una comparación de los precios del oro con la cotización de los principales índices bursátiles, como el S&P 500, que tienen en cuenta a las 500 empresas cotizadas en el mercado bursátil estadounidense y que demuestran esta correlación negativa.
Para terminar este artículo, cabe señalar que es imposible predecir cuál será la cotización del oro dentro de 10 años, es decir en el 2030. Si visita sitios web que le prometen este tipo de previsiones, debe llevar mucho cuidado, porque los datos que se deben tener en cuenta son tan fluctuantes e imprevisibles que incluso los mejores analistas son incapaces de predecir esta cotización. Además, si quiere invertir en el oro durante varios años, tendrá que vigilar sus posiciones y hacer análisis frecuentes y coherentes de los diferentes indicadores fundamentales y técnicos a su disposición para no perderse ninguna tendencia ni al alza ni a la baja. No olvide el análisis técnico de estos valores, que sigue siendo una de las principales fuentes de inspiración para la toma de posiciones de los inversores de todo el mundo.